Alguien más está en Netflix #ChemoRecomendación

¿Cachaste a tu novi@ con alguien más? Esta recomendación que acaba de ingresar al catálogo de Netflix seguro te ayudará a aliviar las penas y darte cuenta que no eres el único.

 

Elvira, somos todos

Elvira es como muchas de sus congéneres en México, una mujer engañada. Como a muchas, la han abandonado.  Gustavo le dijo «Voy por cigarros» y nunca volvió.  En el desasosiego llega la crisis y la búsqueda de certezas es necesaria. Ella es madre de dos pequeños, quienes a su corta edad resulta complicado confiar qué es lo que sucede.

Elvira está confundida, necesita explotar pero no sabe cómo hacerlo. Apenas van 10 minutos de la cinta, escrita y dirigida por Manolo Caro, y esta ama de casa al borde de un ataque de nervios ya es entrañable.

Caro nos sorprende nuevamente, después del buen resultado de «No sé si cortarme las venas o dejármelas largas» con una estética plagada de pinceladas teatrales, muy al estilo  Almodóvar y Jean-Pierre Jeunet, mismas que envuelven al universo de Elvira en una anécdota que bien podría ser atemporal y universal. Todo de la mano de un ingenioso guión que refleja en la pantalla el silencio de una mujer en crisis.

La tensión y la comedia son dos características muy particulares de la cinta. Cecilia Suárez quien imprime en su personaje grandes gestos de inocencia e ingenuidad que evoluciona y progresa. Cada silencio de Elvira, vale oro. Cada verdad y mentira pronunciada de su boca nos lleva a la risa mientras tensionamos la quijada por que conocemos de fondo los grandes costales de preguntas que le dejó el abandono de Gustavo. Por otra parte, la mancuerna con Luis Gerardo Méndez resulta muy genuina sumada a todas las intervenciones especiales de actores como Mariana Treviño (Quien repite por tercera ocasión con Caro),  Vanessa Bauche,  Angélica Aragón y Angie Cepeda.

«Elvira,  te daría mi vida pero la estoy usando» es uno de esos productos que seguramente se volverán entrañables. Habrá que esperar las críticas y elogios de los especialistas, así como los grandes resultados en taquilla, mismos que quiero pensar no serán malos, tanto por su elenco como el gran esfuerzo publicitario de su distribuidora.

2015, el año del orgullo gay #LoveWins

No sé si es mi manera de ver las cosas o este año ha marcado en particular varios cambios en la percepción hacia la comunidad LGBTTI (QRSTUVWXYZ). Diariamente se pueden ver más noticias donde la palabra gay toma relevancia. Confieso que odio esto de «comunidad» porque me hace pensar en que también existe una heterosexual hecha y derecha. En los últimos meses, al menos en el país han pasado cosas muy interesantes en el tema, entre ello el gran anuncio que nos dio la Suprema Corte de Justicia de la Nación (que la CONAPRED calificó de histórico) al emitir la jurisprudencia que declara inconstitucional a los códigos civiles de aquellas entidades federativas donde el matrimonio  aún es entendido como la unión entre un hombre y una mujer.

Si bien esta acción no tiene la facultad de obligar a los estados a legislar de inmediato, el tema sin duda ha despertado revuelo en las cúpulas conservadoras. En Jalisco,  la pesadilla de los pecadores regresó de sus vacaciones en el aparente anonimato para exigir un exorcismo en el país, Juan Sandoval Íñiguez, Cavernal Emérito. De todo esto hay algo que me tiene encantado, que el rechazo ante estas posturas discriminatorias va creciendo por parte de la población e incluso la cobertura noticiosa que se realiza, en ocasiones pinta como un buen cartón del México irreal en el que vivimos.

El matrimonio igualitario en México parece estar cada vez más cerca, pero no es tiempo de cantar victoria aún hay un tramo por trabajar. En esta semana diversas organizaciones de la diversidad sexual se han proclamado en contra del personaje Caraeperro por intentar, desde su postura clérical, interferir en las decisiones de estado, a la par de otros organismos quienes ya se pararon en el Congreso del Estado de Jalisco a exigir que se acelere el tema y se ponga en papel para hacer posible un casamiento de dos novios o novias en el registro civil más cercano a tu domicilo.

Y si, no es la primera vez que la comunidad (gay y no) se levanta para exigir respeto e igualdad de condiciones. Lo que me parece fascinante es que en el mismo año pasan cosas como que un conductor de TV Azteca en Culiacán al presentar la nota de la marcha en la entidad sinaloense, de un cierre con estas palabras «De manera independiente y de forma individual, también estuve participando en esta marcha y con todo el respeto que se merece el grupo de religiosos que estaban ahí que decían en su mensaje ‘busca a Dios, busca a Dios en tu corazón’ y claro, Dios está en el corazón de cada una de las personas independientemente de su preferencia y orientación». Si estuvo preparado o no, el señor tuvo muchos pantalones para editorializar de esta forma tan contundente a favor de la marcha del orgullo y eso es para sonreír. Aquí el vídeo:

En otras decisiones históricas, hoy 26 de junio de 2015, Estados Unidos legalizó el matrimonio igualitario en todo el país anulando la potestad de cada estado para impedirlo y un sinfín de marcas se han unido a la celebración de este fallo poniendo en sus perfiles de Twitter y Facebook imágenes la bandera gay o con ingeniosas publicaciones.

En México paralelo e independiente a esta celebración, el día de ayer Banamex izó una bandera multicolor afuera de la sucursal de dos de sus sucursales para unirse a la celebración el mes del orgullo. Si 2, aún no se animan tanto a hacerlo en más, pero el acto es plausible.

Pero 2015 nos ha regalado más historias, hace algunos meses en Colombia, Juan Pablo Jaramillo, un joven videobloggero salió del armario en un vídeo que lo ayudó a repuntar sus hasta un millón de suscriptores (Hoy a meses del suceso el chico ya va por el millón setecientos). Tras su publicación, recibió un twitt de Ricky Martin y fue llamado a entrevistas en un gran número de medios, incluso en CNN, por tan conmovedor vídeo que incluso impulsó a otras estrellas de YouTube a hacer lo propio y escapar de Narnia. Mika, por su parte,  lanzó su disco «No place in heaven» con más de un par de canciones que hacen alusión al orgullo y la experiencia de nadar contracorriente por tener una preferencia sexual distinta. Greg Holden, cantautor  Country, escribió «Boys in the streets» a petición de la organización Everyone is gay, y en nuestro país la organización «Todo Mejora», que apoya a jóvenes en su proceso de aceptación comienza a tomar más fuerza que nunca.  

Ante tanto suceso no queda más que festejar una cosa más: el estreno en México de Pride, una emocionante cinta basada en hechos reales dirigida por Matthew Warchus que narra cómo ante la huelga de los mineros en Gran Bretaña durante la gestión de Margaret Thatcher en 1984, en Londres se gesta un movimiento para apoyar a los obreros recaudando fondos encabezado un grupo de jóvenes gays y lesbianas: Lesbians and Gays Support the Miners (LGSM).  

Como toda historia hay un antagonista, el mismo del que hemos venido hablando, el rechazo. Al percatarse del origen del apoyo, miembros de la  Unión Nacional de Mineros se consideran ofendidos y avergonzados por recibir dinero de las arcas de personas homosexuales. Sin embargo, un grupo de mujeres, las esposas de los mineros para ser más precisos, se convierten en las aliadas perfectas del LGSM para transformar conciencias y luchar por un objetivo en común: mejorar las cosas. 

La historia de lucha y conciencia que se refleja en esta película no es sino una travesía de emociones por pequeñas batallas que se van ganando, y si, aunque odio sonar cursi, estas batallas son en el corazón. Como ha de suponer la historia cierra tomando tintes cada vez más positivos gracias a la colaboración entre ambas partes y lo mejor de todo: se marca un precedente histórico en aquel país.

Lo que no me deja de confrontar es el hecho que esta historia tuvo lugar hace casi 30 años y nosotros seguimos atorados en la lucha. Mientras tanto a disfrutar que esta cinta se exhibirá en las grandes cadenas y más de algún perdido homofóbico quizá cambie su manera de ver el mundo para aceptar que somos iguales, humanos al fin y al cabo #LoveWins